Ahora "la nueva víctima", para bien o para mal, del programa informático ha sido la neoyorquina Scarlett Johansson, quien ha posado para una nueva campaña del champán Möet & Chandon, del que es imagen desde hace poco.
Las nuevas fotos, que han publicado varias páginas, como la de Just Jared, no han sido del agrado de todos, ya que muestran a una Scarlett evidentemente retocada y, en algunos casos, con muchísimas menos curvas de las habituales, pareciendo incluso demasiado delgada. Pero no son los únicos retoques que llaman la atención: también se dice que han empequeñecido su famosa boca, agrandado la cabeza, han hecho demasiado luminosa la piel y que en algunas incluso han quitado parte del cuello para hacer más bonita la fotografía.
Las fotografías se realizaron antes de que la actriz cambiara su famoso look de cabello rubio por el castaño, y también antes de que comenzaran los rumores acerca de su nueva dieta, que parece alejarla de los cánones de belleza que instauró hace unos años, y que proclamaban la vuelta de la mujer curvilínea.
Las nuevas fotos, que han publicado varias páginas, como la de Just Jared, no han sido del agrado de todos, ya que muestran a una Scarlett evidentemente retocada y, en algunos casos, con muchísimas menos curvas de las habituales, pareciendo incluso demasiado delgada. Pero no son los únicos retoques que llaman la atención: también se dice que han empequeñecido su famosa boca, agrandado la cabeza, han hecho demasiado luminosa la piel y que en algunas incluso han quitado parte del cuello para hacer más bonita la fotografía.
Las fotografías se realizaron antes de que la actriz cambiara su famoso look de cabello rubio por el castaño, y también antes de que comenzaran los rumores acerca de su nueva dieta, que parece alejarla de los cánones de belleza que instauró hace unos años, y que proclamaban la vuelta de la mujer curvilínea.
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